Deseo Sexual Bajo


No podemos pensar que toda disfunción sexual es una reacción patológica derivada de problemas en los neuro transmisores cerebrales exclusivamente. Yo diría que es probable pensar también y de manera muy importante en el deseo sexual bajo como una consecuencia de factores históricos milenarios que han controlado el deseo sexual de la mujer.

Sin temor a equivocarme diría que no ha habido en la historia de la humanidad nada tan continuamente controlado, normado y restringido como el deseo de la mujer pues este puede transformarse en una amenaza al orden impuesto desde el patriarcado, subvirtiendo la sumisión de la mujer al hombre.

También podemos entender el deseo sexual bajo de la mujer como una respuesta reactiva de la mujer chilena a la sexualidad básica del hombre chileno. Es decir hay sin duda un factor relacional que es muy importante pues el deseo conlleva la presencia de otro que articula el despertar o dormir este deseo o al menos la motivación al encuentro.

Cuando me refiero a sexualidad básica del hombre, estoy pensando en las bajas cifras de presencia del hombre en la constitución de familia (50% de los partos, 250.000 al año, las mujeres están solas o con una frágil relación de pareja). También pienso en las dificultades del hombre chileno en manifestar afectos, cariños, emociones. Lo reacio que es al tacto, a la cercanía física y a ser influido positivamente por la mujer.

Pienso en la disfunción más importante del hombre chileno que es la eyaculación precoz, lo que ensombrece el panorama de disfrute tanto personal como de pareja. Pienso en la dificultad del hombre chileno para estimular adecuadamente a la mujer, la facilidad que tiene en confundir señales sexuales con señales afectivas (solo abrazos, cercanía afectiva, etc.).

Todo esto configura un panorama relacional malo, pobre en lo sexual y en lo afectivo que despierta en la mujer una gran frustración que la lleva a defenderse con la baja de la intimidad sexual y del deseo.

Dr Christian Thomas Torres (CesCh).